jueves, 23 de marzo de 2017

Masonería y satanismo son una misma cosa (IV). La lógica del maligno, concluye: aborto obligatorio y global.

por Eulogio López
La lógica del Maligno impone la blasfemia contra el Espíritu Santo: lo bueno pasa a ser malo y lo malo se convierte en lo bueno.
O sea, el derecho a la vida se convierte en derecho al aborto.
Son tiempos de masonería luciferina.
Y el mayor deleite de Satán es el sacrifico de un bebé, el ser humano más inocente e indefenso.
Hablábamos ayer del satanismo de Hillary Clinton, pero no, el libro de Alberto Bárcena sobre la masonería, sin duda acontecimiento del año, da para mucho más. Por ejemplo, recuerda el historiador Bárcena las palabras de Juan Pablo II como “la lógica del Maligno”. Una lógica que lleva, por ejemplo, a la instauración del derecho al aborto en todo el mundo, es decir, un aborto obligatorio y, además, global.
No otra cosa proponía la candidata Hillary Clinton: aquel país que se atreva a proteger la vida estará atentando (sic) contra los derechos humanos.
O sea, la lógica del Maligno. La blasfemia contra el Espíritu Santo: lo bueno pasa a ser malo y lo malo se convierte en lo bueno. El derecho a la vida se convierte en derecho al aborto. Tiempos de masonería satánica.
No es de extrañar. Verbigracia: el libro de Alberto Bárcena nos recuerda que la campaña de “Hillary estaba siendo financiada generosamente por toda la industria abortista”. En especial por la Planned Parenthood (PP). Un dinero de ida y vuelta porque la Planned se alimenta de fondos públicos facilitados, directamente, vía Tesoro gringo, pues durante la Presidencia Obama se derrochó dinero en PP (es lo que primero que ha cortado Donald Trump desde su llega la Presidencia) o indirectamente, a través de los programas de Naciones Unidas… que se financian a través de los gobiernos.
La Planned es verdadera satánica. No se conforma con promover y ejecutar el aborto en todo el planeta (no sólo en  USA) sino que trafica con órganos de los niños asesinados. O sea, la lógica del Maligno, la marca de Satán.
Planteémoslo de otro modo: ¿Por qué a Lucifer le gusta tanto el aborto y por qué el aborto es mucho más que el aborto?
O si lo prefieren,  ¿por qué Hillary está empeñada, no sólo en el aborto libre, gratuito y masivo en USA sino en todo el mundo? A fin de cuentas, ella sólo tuvo una hija y le salió Chelsea.
Reparen, además, en que Satán, Señor del mundo, es un espíritu y, como tal, la cuestión del sexo le resulta de lo más tediosa. Sí, lo utiliza como camino de perversión pero si pudiera evitaría algo tan carnal, tan material. No, lo que Satán adora en el aborto es la crueldad, lo que realmente le interesa es el ensañamiento con la inocencia.
No hay crimen más duro que el aborto. El deleite de Lucifer, que odia al hombre, es el sacrificio de un bebé, de un nonato, el ser más inocente y más indefenso de todos. Vamos, una hemorragia de placer.
Por todo esto, el aborto está en la lógica del maligno. Casi diría que más que la lógica es la conclusión.


eulogio@hispanidad.com



Hispanidad (02/03/2017)


No hay comentarios:

Publicar un comentario